La Panna Cotta, una joya culinaria originaria de la región italiana de Piamonte, ha conquistado paladares en todo el mundo con su suave textura y delicado sabor. En My Way ofrecemos una versión única de este clásico postre acompañada de una macedonia de frutos rojos y nata de vainilla. ¿Quieres conocer detalles curiosos de este postre? Entonces continua leyendo.
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Un nombre revelador
El nombre „Panna Cotta“ proviene del italiano y significa „nata cocida“. Esta denominación hace referencia a su método de preparación y a los ingredientes base que la componen, como la nata líquida y la gelatina neutra. Es un postre que destaca por su simplicidad y exquisitez.
Un legado de misterio
Las raíces históricas de la este postre están envueltas en enigmas y contradicciones. Aunque se dice que su origen se remonta al siglo XX en Italia, las historias sobre su creación varían. Algunos atribuyen su invención a una mujer húngara en la región de las Langhe, mientras que otros la sitúan como creación del chef Ettore Songia en los años sesenta. Esta incertidumbre añade un elemento de intriga a este postre tan querido.
Panna Cotta, Bavaroise y Parfait: sus diferencias
La Panna Cotta, el Bavaroise y el Parfait son postres con texturas similares pero preparaciones distintas. Mientras que la Panna Cotta se cuaja con gelatina y se sirve en recipientes individuales, el Bavaroise es cremoso y se solidifica con huevos y gelatina, y el Parfait es un sorbete semi frío elaborado con crema de leche. Cada uno tiene su encanto único, pero la Panna Cotta destaca por su simplicidad y versatilidad.
Te invitamos a probar este manjar o cualquier otro de los que conforman nuestra carta de postres, para culminar tu cena de la mejor forma.
